oleebook.com

País de nieve de Yasunari Kawabata

de Yasunari Kawabata - Género: Drama
libro gratis País de nieve

Sinopsis

Shimamura regresa al País de nieve atraído por la belleza de la estación y el tradicional estilo de vida. Pero vuelve especialmente por Komako, una joven aprendiz de geisha que conoció en un viaje anterior. Él es un hombre rico, de mediana edad, que intenta escapar de un matrimonio sombrío y de su vida en Tokio. Ella, una bellísima mujer vulnerable a sus propias emociones, que madura ante los ojos de su amante. El amor apasionado que Shimamura despierta en Komako le plantea un dilema: incapaz de corresponderlo, pero a la vez fascinado por su intensidad, optará por repetir y prolongar su estadía en las termas aprovechando la distancia perfecta que le ofrece la relación huésped-geisha. Un tercer personaje, la misteriosa Yoko, teje su destino al de la pareja, con el blanco de la nieve como trasfondo y presencia continua.


Voy a ser horriblemente sincera: ¿me ha gustado?  Sí, pero... Y aquí es donde el tiempo se detiene. Porque los peros tienen esta cualidad: la de parar el tiempo y la dejar una puerta abierta, por la que cualquier brisa puede colarse y dar un giro de 360 grados a la frase. Así que volvamos a nuestra pregunta inicial: ¿me ha gustado el libro? Sí, tanto que no me importaría leer alguna que otra novela del autor. Pero, y esta es la gran incógnita, es una lectura que genera más preguntas al terminarlo que cuando lo estás leyendo. Es un deambular errático por la nieve, un dejarse hundir por su manto blanco hasta las rodillas mientras contemplas desde la ventana de la posada, como una joven aprendiz de geisha camina y descamina una misma senda. Un paseo por un pueblo escondido en la falda de una montaña, el viaje de un hombre rico de mediana edad, fascinado por los sentimientos que despierta en Komako. Y, por si fuera poco, veremos también desde la seguridad de nuestra ventana, a un tercer invitado, a Koko. Una joven que irá tejiendo una urdimbre de seda alrededor de nuestros personajes, hasta convertirse en un triangulo amoroso. En definitiva: ¿Me ha gustado? Sí, pero me he quedado con ganas de poder hablar con alguien del libro!
Esta obra corta de Kawabata es un ejemplo precioso de literatura japonesa. Sus maravillosas descripciones te transportan al País de la nieve, en las montañas más altas de Japón. Allí, donde siempre está nevado, parecería que no hay mucho que describir. No obstante, en primavera florecen algunas pequeñas plantas, los pájaros y los insectos emergen, y el sol baña la nieve.Otro punto que el libro describe y que resulta interesante es el arte del Chijimi, y que consiste en tejer durante el invierno para que con la humedad de la nieve para que resulte un tejido totalmente diferente a cualquiera se vea. Después, esta tela de suele usar para ropa de verano, por lo ligera que resulta, y cuando llega el invierno ers tradición que volviera al País de la nieve para lavarse bien con la nieve nueva hasta que quedaba bien blanca. Por otro lado, los escasos personajes que aparecen en la novela hacen que su lectura se haga más sencilla todavía, sin mucho problema a la hora de relacionarlos entre sí. En la obra queda claro que las geishas no tienen por qué ser prostitutas, sino simplemente mujeres con un nivel cultural alto que acompañan a hombres y les dan conversación. Aún así, las opciones de estas trabajadoras son muy limitadas, tanto para tener una pareja estable como para salir de esta profesión.Esta novela no deja de ser sencilla, en la que no pasan demasiadas cosas, por lo que no me ha terminado de llenar. No obstante, gracias a las descripciones anteriormente mencionadas, he podido disfrutar de su lectura con tranquilidad, aunque, eso sí, sin demasiada sorpresa.
Los textos más antiguos sugerían que la frescura del Chijimi provenía del espíritu de la nieve y que fuera tan adecuado para los kimonos de verano era muestra de las leyes que regin el equilibrio entre los opuestosPais de nieve es la primera novela de Yasunari Kawabata, premio nobel japonés, narra los viajes de Shimamura durante tres inviernos a la región más fría de Japón, cautivado por la particular predisposición de sus paisajes cubiertos de nieve y la vida desolada y melancólica que en esta región impera;quizás trata de escapar de su rutina en Tokio, de su matrimonio, de una vida en ciudad que le parece vacuo y superficial, la novela no lo aclara pero la descripción de los estados de ánimo del personaje lo deja intuir. Aparece otro personaje, Komako, aprendiz de geisha, que conocerá en esa región y con la que se desarrollará una especie de romance o atracción no correspondida por Shimamura, tampoco queda clara, el personaje de Komako es muy caotico en sus emociones y hay otro personaje, Yoko, que tampoco llega aclararse dentro del todo en la narración, a Shimamura le fascina su atmósfera de nostalgia, su manera de mirar, pero el autor no deja de entender del todo cual es su papel en la historia.Tiene una narrativa lenta, y por muchos momentos la historia no se sabe a dónde va, pero coincido con otros lectores en que las descripciones son precisas y hermosas, tanto para los escenarios como para los sentimientos de los personajes a través de comparaciones con el paisaje, definitivamente típico de la literatura japonesa. Es también una novela de contemplación más que de trama, corta como para darle la oportunidad de leerla y conocer a este gran autor.Puntuacion:8/10
Esta es la obra con la que Kawabata consiguió el primer nobel (1968) para un autor japonés (tampoco han sido muchos más, lamentablemente) Shimamura, un hombre rico de mediana edad, regresa durante tres inviernos a la región más fría del país (la presencia del frío y la nieve es constante) atraído por la belleza del paisaje, el tradicional estilo de vida, pero sobre todo vuelve por Komako, una joven aprendiz de geisha que conoció en un viaje anterior, de la que parece estar enamorado, o tal vez huir de un matrimonio fracasado. Una segunda mujer aparece en la vida de Shimamura y lo complica todo, hasta el punto que, a pesar de no tener ningún contacto físico, genera un desenlace trágico. La Naturaleza está siempre presente en la obra, es primordial, las descripciones son bellísimas, obra de un autor que es especialista (todos los autores japoneses lo son en cierta medida) en describir las emociones humanas a través del paisaje, sobre todo de la futilidad de la vida. Son esas polillas que aparecen casi al final de la obra precursoras de lo que va a suceder, una presencia angustiosa y desagradable que al propio protagonista masculino de la historia incomoda sin saber muy bien el motivo, aunque es cierto que él siempre le está recordado a su geisha (Komako) lo inútil que es todo... Maravillosa.