Pocas veces he tenido la oportunidad de leer unos cuentos que se parezcan tanto a su autor como los que integran esta pequeña antologÃa. Son las historias de un desadaptado.
Los personajes de estas narraciones, que se asemejan tanto a la realidad, parecen desmentir desde una perspectiva artÃstica, y por lo tanto válida, el criterio de Ortega y Gasset, ese español que pensaba bastante bien pero escribÃa bastante mal: los protagonistas de estas páginas, que usted tiene ahora entre sus manos, se esfuerzan por ser ellos mismos no con sus circunstancias, sino a pesar de sus circunstancias. Más aún: luchan con la vida en contra de sus propias circunstancias. En este orden de ideas resulta conmovedor y arquetÃpico el caso de Göering, un pobre juez traicionado en su candor polÃtico, que se aferra dramáticamente a Brahms en un pueblo polvoriento, donde solo se escuchan las canciones vallenatas, y que se acuerda de Freud mientras baila en la trastienda de una cantina tropical con una barragana ardiente.