Anoche, anoche, con el catalejo, vi a un muerto salir de su tumba. SÃ, estoy segura, ahora estoy segura, salió de su tumba. Abandono el cementerio y vino a la pensiónÂ… Estoy segura de que es él, las ropas son las mismas, aunque antes no tenÃa ojos y ahora sÃ. Su piel estaba repugnante, pero tenÃa que oler como huele éste ahora. ¿Es que no os dais cuenta? ¡Huele a cadáver, huele a cadáver!