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Vuitanta-sis contes de Quim Monzó

de Quim Monzó - Género: Humor
libro gratis Vuitanta-sis contes

Sinopsis

Traduït a més d’una dotzena de llengües, la crítica europea ha relacionat Quim Monzó amb Kafka, Borges i Rabelais. El seu primer llibre de relats, Uf, va dir ell (1978), va ser valorat unànimement com una aportació de primeríssim ordre a la renovació del panorama literari local i a la configuració d’una llengua literària moderna i genuïna. Després van venir Olivetti, Moulinex, Chaffoteaux et Maury i L’illa de Maians. A cada llibre ha sabut augmentar l’exigència i el rigor, i ha generat a més un enorme i desacostumat interès popular, com a El perquè de tot plegat (1993) i Guadalajara (1996). En aquesta obra Monzó ha revisat tots els seus contes publicats fins al moment, aplicant-hi aquella mateixa exigència i rigor. Vuitanta-sis contes n’és el resultat. El lector hi apreciarà el millor Monzó.


Reseñas Varias sobre este libro



¡Brillante! Todos los cuentos de Monzó son, por lo general, absolutamente únicos; y el último libro contenido dentro de los varios que integran este “Ochenta y seis cuentos”, a mi entender de los mejores, o directamente mi favorito, lo corona de una manera impecable.9 s Raro de Concurso521 2

Leí este libro hace más de 20 años y hace poco me acordé de él y quise hacerle una revisión. El resultado no ha podido ser más satisfactorio. Y es que como me pasa con el disco de "69 love songs" de los Magnetic Fields, cojas el número que cojas, aciertas.
Desde luego se trata del libro más completo para acercarse a Monzó, pues recoge la mayoría de sus relatos, editados en libros independientes. Son muchos cuentos, pero cortitos y que se devoran.

Los primeros del libro corresponden a la razón de haberme acordado de él. Y es que leyendo hace muy recientemente "la lotería" de Shirley Jackson se me vino a la mente Monzó. Los mismos personajes y situaciones angustiosas, laberínticas y kafkianas. Pero con una diferencia. Mientras que los protagonistas de Jackson son un espejo de su mente depresiva, los de Monzó salen de una imaginación desbordante y algo gamberra. Es como si les faltaran verdad, aunque no por ello dejan de ser gratificantes leerlo. Pero no es lo mismo describir la inquietante búsqueda del amante que te ha prometido casarse contigo en una ciudad hostil y triste, que las peripecias de un escritor perseguido en su casa por los electrodomésticos. Por poner un ejemplo.

Pero bueno, enseguida me sumergí en el mundo monzoniano de situaciones cotidianas a las que el autor da la vuelta y las mete en una dimensión desconocida, inquietante, llena de reflexiones largas y serpenteantes que acaban en finales de traca. El hombre que llega del trabajo a su nueva casa en una urbanización de adosados, saluda a su mujer y cuando se sienta a leer el periódico se da cuenta de que no la reconoce (ni a ella ni a la casa, pero ella a él parece que sí). O el tipo que se pasa 1 hora dando vueltas a lo que se va a poner para su cita para que al final se descubra (para sorpresa de él y del lector) que el que viene a casa es la señora de la guadaña. O como último ejemplo, el perverso juego de "tú la llevas", pero con una halitosis bestial.

En "El porqué de las cosas", otro de los libros incluidos en este recopilatorio, las cosas siguen igual. Esta vez más centrado en las relaciones personales y sentimentales. Reflexiones y situaciones locas sobre la vida en pareja, el sexo, el deseo. Y un cuento, el más desternillante que he leído suyo, "Entre las doce y la una" (http://que-de-cuentos.blogspot.com/20...), que parece un diálogo de una película de los hermanos Marx. En este volumen también está la semilla de las readaptaciones que hará después de los cuentos clásicos. Como esa "la bella durmiente" en el que una madura Cenicienta, a la que su marido el príncipe no hace caso, descubre cómo le pone los cuernos con sus hermanastras (con las dos a la vez).

Y para finalizar viene el mejor de todos los libros, en mi opinión: "Guadalajara". Aquí hay de todo y muy bueno. Como esos aqueos abandonados dentro del caballo de Troya, al que los troyanos ignoran. O esa revisión de la metamorfosis de Kafka, pero con la cucaracha Gregor hecha adolescente. O el conflicto padre-adolescente en el hijo y nieto de Guillermo Tell.

En fin, lo dicho, mucho donde elegir y disfrutar. Y releer.

Y ya está bien por hoy. O me centro y dejo de fantasear o voy a acabar como el protagonista del 87º cuento.4 s Silvia RomanoAuthor 11 books46

Me pasó algo curioso con este libro. Empecé desde el principio y me aburrí. No enganchaba con las historias. Estaba a punto de dejarlo cuando decidí leer los cuentos de forma azarosa, salteada. Ahí me enganché más. Son historias cortas. La mayoría no tienen un contexto. Hay pocos personajes. De a ratos recuerda a algunas historias de Paul Auster.
Su prosa no es poética. Es eficiente. Entretiene pero no conmueve y yo le pido a la literatura que en algún punto me mueva una fibra especial. No tiene que ser necesariamente una prosa sofisticada. Es una tecla especial que no sabría definir.
Estos relatos entretienen y eso tiene mérito pero, en su mayoría, resultan forzados, en especial los primeros. Juega con la fantasía o con situaciones que pueden ser hasta ridículas, en eso puede resultar original, pero sigue sonando artificial.
Le pongo tres estrellas porque te salvan un viaje en metro o una tarde de piscina y eso no es fácil pero pido más. 2 s ANA28

Me encanta el surrealismo de alguno de sus relatos. Además de ser un gran viaje en español.1 Miguel Jiménez160 21

Pasa algo curioso con este libro, el inicio fue de los peores que he tenido. Historias que me atraían poco por no decir que nada, y con un estilo del autor que se prestaba mucho a la confusión pues omitía toda regla ortográfica, como no poner comillas en diálogos y los guiones, esto en los primeros cuentos. Afortunadamente conforme pasaba de cuento en cuento cambió —no del todo— esta manera de escribir, al igual que los temas de los relatos.

Creo que es importante mencionar que el autor mantiene dos "géneros"; uno cuando escribe sobre el amor como si estuviera soñado, las relaciones de pareja y el sexo, y otro en donde se ve su lado más creativo, y por esta parte en verdad tiene cosas interesantes, me gustó mucho. Digo que es curioso porque tiene cuentos que me gustaron, pero son más o menos como 25 de los 84 lo cual dice muy poco. . Pongo los que más me gustaron, el único con 5 estrellas: "No este tan seguro", que es espectacular. Estos con 4 estrellas: "La dama salmón", "En punto", "Entre las doce y la una", "Halitosis", "Vida familiar", "Vida de los profetas". El resto de los 25 les puse 3 estrellas, son buenos, aceptables.

Debo decir que había cuentos en los que el autor parecía que se aferraba a contar historias lo menos interesantes que pudiera, algunas nomás no me atraía su argumento, pero bueno supongo que esos relatos no son el tipo de historias que me gustan. En fin, Quim Monzo tiene buenos cuentos, algunos sorprendentes porque son ingeniosos, pero sí considero que está un pelin sobrevalorado.historias-cortas humor-negro realismo1 Paco139 4

Gran compilación de cuentos, muy oscuros e irónicos. Muchos rebosantes de fantasía, de esos donde la magia aparece de pronto y transforma la realidad. Algunos de ellos con una tristeza espantosa. Intensos, sucios y poco convencionales. Escritura interesante, ideas buenas. En muchos de ellos destroza mitos comunmente aceptados, historias conocidas y les da otro matiz. Cuentos universales y cosmopolitas, despojados de cualquier regionalismo catalán.1 Unicorn Carnival34 19

86 relatos componen este volumen: cada uno diferente al anterior. Abundan aquellos que dejan una sensación de zozobra en el lector.1 Postposmo3 1 follower

No tendría más de diecisiete o dieciocho. La vida conservaba intacto el precinto, Borges y Cortázar no existían, y el césped de la facultad era la certeza de la eternidad. Junto a mí, derrumbado sobre la alfombra verde de una mañana cualquiera, al bueno de Yeye le dio por decir que se estaba leyendo un libro donde un tipo se alimenta de letras. Curiosidad y miradas de interrogación. Más de una década después, con la vida mutada en manojo de preguntas y los argentinos puestos en su evidente pedestal, no he dudado ni un suspiro en volver a comprar uno de los libros que más me han marcado en el rato que llevo respirando: los Ochenta y Seis cuentos del catalán, periodista, articulista de La Vanguardia y adicto a Twitter Quim Monzó. Por humanidad y respeto, el colorado Anagrama compacto de bolsillo no toleraba ya más manoseo y amputación.

Un libro donde un tipo se alimenta de letras. En efecto, «descubrió que las sans serif eran más digestivas que las avec serif; que, de éstas, la égyptienne era la más pesada, tanto que, comida antes de dormir, producía insomnio o pesadillas estremecedoras». Los 86 cuentos de Quim Monzó contiene los cinco volúmenes de relatos Uf, dijo él (1978), Olivetti, Moulinex, Chaffoteaux et Maury (1980), La isla de Maians (1985), El porqué de las cosas (1993) y Guadalajara (1996) y constituyen uno de los más notables ejercicios de la historia del cuentismo en catalán y castellano.

Abunda lo fantástico, sí, pero este libro tiene poco que ver con J.K. Rowling. A pesar de que en otro cuento haya un hombre que después del orgasmo se transforma en papagayo y se va a vivir a la selva tropical que su amante atesora entre los pechos, la fantasía sólo es el vehículo con el que Monzó nos introduce en su particular mundo de enredos y desencuentros. Con Barcelona como escenario, escenas de familiaridad extrema como argumento, y un fondo dominado por el ser humano, puesto en evidencia. Aquí de lo que estamos hablando es de un banco de pruebas de la psicología humana.

Sirviéndose de una narración sencilla colmada por un giro o doble giro, Monzó juega a poner sobre el tapete de lo cotidiano a miserables corrientes con ambiciones corrientes que se ven enfrascados en atolladeros inesperados. Desgraciados que, armados de una ristra de principios presuntamente inamovibles, se replantean su escala de valores cuando la fatalidad o la simple arbitrariedad de la vida hacen tambalear su fe en su particular orden de las cosas: recibir llamadas sexuales y desagradables de un anónimo para descubrir, sólo cuando han cesado, que se echan de menos, o divisar en una misma tarde a la misma mujer en cine, librería y restaurante.

¿Qué hago ahora?
¿Qué debe hacer aquel que lleva 50 años escribiendo la obra de su vida y descubre que la tinta de los primeros volúmenes empieza a borrarse? ¿Por qué un enfermo de la puntualidad acostumbrado a presentarse a las citas con una hora de antelación es capaz de aguantar hasta tres horas más antes de aceptar que le han dejado plantado? ¿Cuándo el hombre que jamás terminó de leer un libro por miedo a que el final le decepcione reunirá el valor para «dejar de aplazar la decisión final»?

Monzó tiene una entrevista estupenda en JotDown donde se define como un ser asocial que no entiende las relaciones entre personas, ni la amistad y, no digamos ya, la felicidad. Sus cuentos tienen algo de esto. Son una deconstrucción de las escenas y los roles habituales que estamos acostumbrados a ver en cualquier tipo de ficción, y nos presenta a personajes que hacen lo que hacen sin saber muy bien por qué lo hacen, más atentos al instinto que al raciocinio. Y eso es los que los dota de humanidad.

Hombres inseguros, mujeres posesivas. Seres humillados, tristes y solitarios que, quitando sus verdades insoslayables, sienten miedo, quieren ser aceptados y viven en la mentira y el descontento. Monzó conmueve a pesar de la narración fría y las descripciones analíticas. Cada cuento nos habla de ilusiones por colmar, retratando el absurdo y el esperpento al que todos nos plantearíamos descender con tal de arrimarnos un poco más a eso que pensamos que nos hará felices:

«La enfermera jefe mira el reloj. No le va nada bien que se le haya muerto un paciente de en este momento. Le falta un cuarto de hora para irse, y hoy más que nunca le interesa salir puntual porque por fin ha conseguido que el novio de su mejor amiga le haya dicho que se vieran, con la excusa de hablar, justamente, de su amiga.»

La sección dedicada al amor y la pasión es la mejor. Adulterios, matrimonios, noviazgos de una noche…todas las fórmulas posibles son escrutadas por una pluma realista e irónica (y dosis de humor reguladas con precisión) que transporta al lector a una incómoda sensación de familiaridad. Ochenta y seis cuentos, como todo buen libro, no brinda ninguna respuesta. El lector que se enfrenta a sus páginas sólo las abandona con más interrogantes.

Reseña sacada de https://postposmo.com/ochenta-y-seis-... kashna83191 13

És el recull dels llibres de contes del Quim Monzó des de Uf, va dir ell fins a Guadalajara. Contes d'humor, irònics, cínics, sempre donant-li una volta a la realitat. M'agrada llegir el Quim Monzó perquè igual que em passa amb altres escriptors catalans, el trobo proper. Per cert... no m'agraden gaire els primers contes... però amb el temps va polint la seva tècnica i els contes milloren mot molt. Lola28 1 follower

No te aburrirás, al final son 86 cuentos, todos muy distintos, que si te aburres de uno te vas al siguiente. Yo escogí este libro porque quería leerme algo en catalán y me ha acabado gustando mucho. Quim Monzó escribe cuentos para TODO y tiene el arte de mantenerte enganchado. Se me ha echo un poco largo pero por lo demás un muy buen libro y definitivamente una recomendación para los que quieran leer en catalan. Paulo César94 1 follower

Llegué a este libro con mucha ilusión, pero al décimo cuento entendí que la vida es muy corta para obligarse a terminarlo. No me quedó claro si los cuentos son de humor y ficción mezclados con casos de la vida real o si hacen parte del repertorio de un narrador oral. Jordi Salazar567

Al final se m'ha fet una mica pesat. Potser cal llegir-ho en petites dosis. Elisa83 2

Demasiados cuentos juntos. Es un libro que reune cinco libros anteriores. Hay cuentos que me han gustado y otros que no he terminado de entender. Creo que son demasiados cuentos Javier Iglesias129 2

Kafkianismo posmoderno y artificioso. Bien diseñado y bien armado. Milimétrico, brillante las más de las veces y también las más de las veces también algo cansino. Antoni Guinovart13

Perfecte per tenir-lo a la tauleta de nit i tornar-hi en cas de necessitat, és a dir, sovint. Pili196

Un bon recull dels millors contes de Monzó Elena39

Todos los cuentos tienen ese aura maravillosa. Ninguno te deja indiferente. Alícia Mirabent Rodríguez 2

L'encant dels contes d'en Quim Monzó Marc Sums3

Uf, va dir ell: 3
Olivetti, Moulinex, Chaffoteaux et Maury: 4
L'illa de Maians: 5
El perquè de tot plegat: 3,5
Guadalajara: 4 Ezkil14

Quim Monzó crea situaciones absurdas en las que personajes sin identidad reaccionan de manera inesperada y humorística. Debido a que se propone describir escenas cuotidianas, utiliza un lenguaje sencillo y directo, sin hacerle perder el tiempo al lector con perífrasis que no aportan nada. Lo único que se le puede reprochar a este autor es que siempre hace más o menos lo mismo, sigue la misma "fórmula", pero hay que reconocer que lo hace perfecto. Cada cuento por sí solo tiene defectos, pero forman un conjunto bastante atractivo, en el que encuentras distintos recursos literarios interesantes: intertextualidad, metaliteratura, estructuras narrativas complejas, referencias que solo se pueden entender si tomamos en consideración el contexto en el que Quim Monzó escribió ese cuento en concreto... así como temas universales y atemporales: las dificultades de las relaciones amorosas, el absurdo que supone estar vivo, las peculiaridades del ser humano, el ridículo...
Quienes hayan leído a Raymond Carver notarán su influencia en los cuentos de Quim Monzó. Para disfrutar más todos los aspectos de este volumen, recomiendo leerlo en catalán. Para finalizar, me gustaría añadir que, quien haya leído todos los cuentos de este autor (es decir, este volumen, "El millor dels mons" y "Mil cretins" -ya que estos dos últimos NO están incluidos en "Vuitanta-sis contes") y se haya quedado con ganas de más, puede leer a Sergi Pàmies, que tiene un humor y un estilo parecidos, o a Raymond Carver, que, como ya he dicho, es el modelo al que Quim Monzó imitó al principio de su carrera como escritor. Rómulo48 5

Humor, gracia, estilo.relatos Eva38 1 follower

Quim Monzó, com sempre, brillant! Molt recomanable per a tots aquells que vulguin passar una bona estona llegint relats originals.catalan-literature favorites short-stories Anna108 5

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