BRENT Barton bajó las escaleras del hotel portuario. El conserje le miró con disimulado interés, percibiendo el cambio en su atavÃo. Una cazadora, tejano azul y botas cortas, sustituÃan al traje bien cortado y a los zapatos de tafilete con que habÃa ingresado el nuevo huésped media hora antes. Aquel cambio de ropas no tenÃa nada de particular, puesto que el hotel alojaba marinos y portuarios. Sólo que ellos se mudaban a la inversa. VenÃan con uniforme o ropa de trabajo y salÃan enfundados en ropa de calle. Apenas se fue Brent Barton el conserje descolgó el teléfono. —Urgente con Nick Kester. De parte del conserje del Harbor Nest. Aguardó unos instantes y oyó: —El patrón no está, pero da lo mismo. Soy Milo Samson.