Este libro, partiendo desde la psicologÃa, la teologÃa y el periodismo de investigación, presenta un estudio muy riguroso y de muy graves conclusiones. En suma, muestra cómo la mayorÃa del clero actual mantiene relaciones sexuales; señala la absoluta falta de legitimidad evangélica del celibato obligatorio; y analiza los intereses que llevan a la jerarquÃa católica a forzar hábitos sexuales patológicos y/o delictivos entre el clero. El autor defiende el derecho del clero al matrimonio y a una vida afectivo-sexual digna, pero también denuncia, con nombres propios y casos documentados, a muchos sacerdotes actuales protagonistas de atropellos sexuales —sobre menores y adultos— y a los obispos que fomentan y encubren hipócritamente tales abusos.