Seth era un muchacho dÃscolo y retraÃdo cuando a los diez años fue adoptado por Ray Quinn, viudo y casi un anciano. Con el paso del tiempo el cuarto Quinn se ha convertido en un pintor de prestigio y, tras una estancia en Europa, vuelve al pequeño pueblo costero donde sus hermanos-tÃos, Cam, Ethan y Phillip, junto a sus esposas e hijos, regentan un negocio de construcción de veleros. Finalmente, en una casita blanca y azul, en la que nunca falta una hamaca en el porche y un perro en el jardÃn, Seth parece haber encontrado la paz con su peculiar familia adoptiva. Allà vive un apasionado amor con una joven... hasta que su madre biológica se interpone de nuevo en su camino.