Elena Rinc?n es una juez de unos 35 a?os que vive en Fuencarral (Madrid). Su padre ha muerto hace unos meses y se acuerda de ?l con una mezcla de culpa y resentimiento. Si la muerte de su padre le priva del pasado, su relaci?n con el forense carece de futuro. Intuye, sin embargo, que est? al borde de algo nuevo y se fructifica en el metro, cuando ve, sentada frente a ella, "un ?ngel sin alas, una diosa", "una mujer cuyas facciones ella hab?a so?ado para s? misma en un tiempo remoto".