Mañana termina el curso y yo, Marta, todavÃa tengo el corazón dividido. Llevo 3 años enamorada de Francisco — Fran para los amigos —, mi mejor amigo, y por supuesto, aún no le he dicho nada. Le he visto pasar por dos novias, no quiero saber cuantas conquistas de una noche, y nadie ha hecho nunca nada. El miedo al rechazo es demasiado fuerte.Asà que cuando el último dÃa decido hacer la cosa más infantil del mundo a mis 21 años, y termino dejándole una carta en la mesa despidiéndome, lo último que esperaba era que terminase invitando a tomar algo con él.Ese “algo” terminó convirtiéndose en una noche a su lado. Y sÃ, eso incluÃa sexo. Mi sueño hecho realidad, únicamente para ver cómo se rompÃa ante la perspectiva de un verano que nos separarÃa.O eso pensaba yo, ya que al despertar juntos, mientras yo procesaba la “cruda realidad”, él se preparaba para ofrecerme algo; subir en su moto e ir a su casa de verano, a pie de playa, juntos.
Advertencia: Un romance juvenil cargado de emociones, pasión, sexo y sinceridad.