¿Cuántas cicatrices tendrÃa que seguir dibujando en su piel para creer que el mundo la verÃa como una muñeca defectuosa?
Cuando Hunter le tendió una mano para trabajar en Gallagher no consideró que tenerle al lado cada dÃa serÃa tan difÃcil. Se suponÃa que debÃa odiarle por cada una de las cicatrices que habÃa dibujado en su piel. Sin embargo, él habÃa cambiado. En sus ojos cristalinos como el agua solo habÃa palabras sin voz y ganas de volver a intentarlo, pero Chiara no confÃa en nadie, ni siquiera es capaz de ver que los cambios no la hacen monstruosa sino que le proporcionan una tonalidad diferente.