Como su título, creo que la autora ha perdido demasiado pronto el rumbo de una historia que prometía mucho y se ha quedado en nada. Y es que su trama insulsa y tediosa, plagada de situaciones repetitivas y pesadas, logran que terminar este libro se convierta en toda una proeza.Conozco a la autora, Maggie Stiefvater, de lecturas anteriores. En general, puedo decir que ha mejorado desde sus inicios literarios. Sin embargo, Stiefvater no deja de resultarme una escritora muy mediocre con un estilo de escritura simplón, superficial y poco desarrollado. Y eso es debido a su prosa lenta e insulsa, un lenguaje funcional con algún aderezo lírico en forma de canción decepcionante y unas descripciones muy básicas y generales como para llegar a trasmitirte nada. Pero lo peor, con diferencia, son los personajes. Si conocéis los libros de los Lobos de Mercy Falls, ya sabéis quienes son Cole e Isabel, mis dos personajes favoritos de toda la saga. Y eso es por que son fuertes, atrevidos y directos. En esta nueva entrega, Isabel parece tener mentalidad de adolescente retrasada, pese a su 19 años, y Cole, pues…se ha desprendido de toda su magia convirtiéndose en un ser con tantas caras que, como el título, ha perdido el norte.Si habéis leído los libros anteriores no tendréis muchas dudas acerca de lo que trata Perdido. Y es que al terminar la trilogía, la situación de Cole e Isabel quedó un poco abierta, por lo que en este libro tiene su anhelada continuación. Haciendo una breve sinopsis diría que Perdido nos narran las historias de Cole e Isabel en California. El primero, cantante de un antiguo grupo, vuelve a California por una nueva oportunidad para enmendar su carrera, su vida y sus emociones. La segunda, vive una vida complicada, trabaja en una tienda de ropa y estudia para lograr entrar en la facultad de Medicina. Pero su vida, miserable y vacía, está muy bien oculta tras la máscara de la indiferencia. Cuando ambos se reencuentran tendrán que decidir si llevar un paso más allá su relación o rendirse definitivamente. Como podéis ver la historia es muy estándar, por lo que la diferencia la deberían de marcar los protagonistas. Y eso, desgraciadamente, no ocurre. Al libro le sobran muchas páginas con escenas absurdas, divagaciones estériles e idas de ollas más propias de una adolescencia disfuncional que de dos jóvenes adultos. Eso si, el final es un happy ending de manual. Y es que el desenlace se resuelve muy deprisa y resulta un poco hueco. Muy bonito en la forma, pero no te llega al corazón.En definitiva, Perdido,es más de lo mismo. Otra obra prescindible dentro del saturadísimo mercado de la novela juvenil. Pero por lo menos, es de lectura fácil por lo que no te cuesta mucho terminarlo. No obstante, yo sí que he perdido la fe en esta autora y no creo que se vuelva a cruzar en mi camino lector durante mucho tiempo.

Autor del comentario: REAH_29
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