La sorpresa de ver pasar una manada de reses por la calle principal de la población, hizo asomarse a los vecinos a las puertas.
¡Cheryl
! exclamó uno que estaba a la puerta del saloon de que era propietaria la llamada. ¡Mira, ven
! La muchacha, pues era bastante joven aún, acudió a la llamada.
¿Qué es esto? exclamó. ¿Es que se han vuelto locos? ¿De quién es ese ganado?