A la mejor espÃa del mundo le ofrecen un contrato de medio millón de dólares por trabajar una semana (recordemos: son dólares de los años sesenta). Ella acepta y parte hacia el exótico paÃs llamado Trópico. Allà chocará finalmente con los oscuros protagonistas de las sordas luchas que las grandes potencias sostenÃan por la consecución del petróleo del mundo, sin desdeñar el que pudieran obtener de pequeños paÃses como Trópico, paÃs que nunca ha existido más que en la imaginación del autor. Actualmente, las luchas por lo mismo son más descaradas y brutales, aunque dotadas de la desfachatez del disimulo y de la mentira flagrante que a nadie engaña aunque la tolere.