Esta obra, escrita por Lope de Vega, cumple todas las características del teatro de la época. Es una obra muy versátil que mezcla el amor, con el honor (o más bien el agravio), la deshonra y la justicia divina, que se manifiesta en la forma del Rey. Escrita hábilmente en verso y con un estilo exquisito, el autor ha sabido plasmar a la perfección las costumbres, e incluso la forma de hablar, de los pueblos de la región gallega de esa época. Es, con todo, una obra muy corta que recomiendo, ya que tiene de todo: un héroe y su fiel criado, una heroína valiente y decidida, un villano repugnante y un juez que al final imparte justicia y deja contentos a todos (o casi todos).

Autor del comentario: REAH_29
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Magnífica obra de teatro de Lope de Vega, en la cual se muestra un detalle ya ignorado de la función de los reyes, que retomara Otto de Habsburgo en uno de sus trabajos: la función jurisdiccional del rey. Fuera de este elemento, y a pesar de que hubo una cierta tensión en algunos episodios de la obra, a mi parecer el fin algo repentino de la representación cuaja difícilmente con el ritmo que mantenía ésta. Evidentemente, y si esto es virtud del texto, dejo éste una enseñanza: que la justicia tarde o temprano llega aún a los más fuertes del reino. Igual es por esta "moraleja" que igual merece ser leída esta obra.

Autor del comentario: CARPETINI
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