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Reseña y opinión personal:Allison es una fotógrafa, cuyo novio la había abandonado de un día para el otro y, junto a sus pertenencias, también se había llevado todos los negativos en los que él aparecía, ya que era modelo.Allison tiene que hacerse cargo de la portada de un libro de romance, por eso, contactándose con la agencia con la que suele trabajar, termina conociendo a Rick. Queda impactada con él desde el minuto cero cuando, Mattie, quien trabaja para la agencia, le envía muestras de fotos, tanto de hombres como de mujeres.A medida que pasan los días van surgiendo diferentes situaciones y problemas en relación a lo que Allison necesita para la sesión de fotos y Rick está ahí para ayudarla. de esta forma, ella descubre que él no es como Jason, su ex, pero aún no quiere conocer a otro hombre ¡y menos otro modelo! ¿Lo logrará?Ocurre un imprevisto y los protagonistas se terminan distanciando hasta que un taller sobre fotografía parece ser el motivo ideal para acercarlos nuevamente y, al menos, cruzar algunas palabras. Los invito a leer la novela para descubrir qué sucede durante esos días en otra ciudad.En relación a los personajes principales puedo decir que Allison se muestra bastante indecisa; aunque no quiera comenzar otra relación por miedo a que la defrauden nuevamente y piense en Jason varias veces, no se torna insoportable a lo largo de la novela, a pesar de que su ex es un tema recurrente.Basta con decir nunca más para que la vida nos ponga a prueba y eso es lo que le sucedió a Allison.Por otro lado, Rick? ¿Qué puedo contarles sobre él? Rick me encanta porque, a pesar de que él sabe que es lindo, sexy, que la vida lo favoreció físicamente, él no se muestra jactancioso, no es creído, se viste lo más normal posible y con ropa que ya tiene un tiempo. Y la paciencia que tiene o que desarrolla es envidiable.Ambos personajes son increíbles y se complementan muy bien. Son simpáticos, divertidos, nos sacan sonrisas con sus ocurrencias. El feeling entre ellos es palpable desde el comienzo y va creciendo con el correr de las páginas y es ameno ver ese tipo de relación tan amistosa, a pesar de que tendría que haber sido meramente profesional.El capítulo donde se describe la escena de la sesión de fotos es increíble: los detalles, la redacción que nos hace sentir que estamos participando de ella; y el humor que no abandona.LaVyrle Spencer es una de mis autoras favoritas de novelas románticas. Siempre me sorprende con sus historias y sus descripciones, tanto del ambiente como de los personajes y sus sentimientos. Es imposible no tomarle cariño a sus personajes y desear que el libro no termine o querer una segunda parte.