«El suelo inofensivo me daba miedo porque no sabÃa si debajo de sus pies se abrirÃa la tierra.» ¿Qué pasa cuando someter a otras personas es la única forma de sobrevivir ? ¿La desobediencia es posible siempre? ¿Qué redes de complicidad teje el silencio? ¿Cómo distinguir entre vÃctima y victimario? Aquà hay dos narradoras potentes y perspicaces: Lucero y Dolores. La primera es una adolescente de juicios agudos y la apremiante necesidad de recibir aceptación. La segunda esla madre de Nancy, compañera de secundaria de Lucero, que atraviesa la agonÃa de buscar a su hija desaparecida. Ambas voces enhebran una historia compleja sobre un grupo de niñas casi adultas cautivo en una casona en los márgenes de la ciudad. Laura Baeza traza una novela entrañable y brutal que añade nuevas notas a las discusiones sobre la violencia, el deseo, la amistad, la ternura y la libertad humana. Con su oÃdo privilegiado y una prosa accesible sin llegar a dócil, la autora nos lleva desde las primeras lÃneas a un viaje por las contradicciones de la adolescencia. El lugar de la herida es un territorio que sangra y cicatriza al mismo tiempo, sÃmbolo de un paÃs que reproduce y resiste la violencia feminicida en pleno siglo XXI.