Las enormes fauces abiertas se precipitaron sobre él. Cabe empujó a Gwen a un lado y dio un salto atrás, pudiendo apenas esquivar la enorme cabeza. Con un gruñido, el dragón levantó la testuz y dio rienda suelta a su poder. El gigantesco adversario de Cabe podÃa ser de color dorado, pero su magia era tenebrosa. Mientras repelÃa una demoledora pared de energÃa, el hechicero comprendió que todo el mundo habÃa subestimado al Emperador Dragón. La Dama se le unió en sus esfuerzos, fusionando su poder con el del joven, y el gran leviatán se vio obligado a retroceder hasta su trono. Rugió dejando escapar un torrente de llamas. Cabe alzó un escudo mágico que los protegiera a los dos, pero el calor resultaba casi insoportable y perdieron la ventaja que habÃan conseguido. El dragón atacó de nuevo, y esta vez añadió la amenaza fÃsica a su ataque mágico. Unas afiladas garras cayeron sobre los dos humanos... Dragones de Fuego es el primer volumen de la apasionante tetralogÃa El Reino de los Dragones que se desarrolla en un mundo dominado por los reptiles malvados, la intriga y la magia.