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Este libro, que es el primero de la Serie Departamento Q, fue publicado en 2010, osea, que voy bastante atrasada, como verán.Afortunadamente los libros no caducan y si hay algún perdido como yo, que todavía no se hace de esta serie, pues a correr a buscarlo porque realmente vale la pena.Este escritor Danés, realmente ha dado en la diana con su estilo a la hora de escribir esta novela negra.El suspense y el tipo de investigación, me recordó mucho a la vieja guardia, a los libros policíacos clásicos como Agatha Christie, pero traídos a la actualidad magistralmente, no cae en clichés y eso hay que agradecerlo mucho, porque cuando ya llevas algún tiempo leyendo este genero y aun y cuando los libros te gusten, en muchas ocasiones terminas con la sensación de haber leído mas de lo mismo.Este no es el caso, en este libro vemos a un detective bastante cínico del cual se quieren deshacer por su muy poco apreciada personalidad, la verdad es que sucede que Carl Morck es cínico, no tiene pelos en la lengua, es un extraordinario detective de homicidios y lo sabe y no se corta a la hora de decirle sus verdades a todo el mundo, en fin, que de político no tiene nada, por lo tanto no hay quien lo aguante, sin embargo, en otros aspectos vemos que realmente es un pan de dios del que todos sus allegados abusan.Esta pasando por un mal momento después de que su ultimo caso asignado saliera mal, donde uno de sus compañeros muere y el otro queda paralizado de cuello para abajo, el sale relativamente ileso físicamente, pero con muchos cargos de conciencia, no pueden correrlo, claro, pero entonces, los jefes, que como buenos jefes, abusan de sus circunstancias, se aprovechan de un nuevo presupuesto creado para hacer un nuevo departamento para resolver casos no resueltos y ponen a Carl al frente de este, no esperando nada, excepto deshacerse de él y aprovecharse del presupuesto asignado para otras cosas.El caso es que a Carl le asignan un ayudante, alguien que limpie, haga recados y haga de su chofer, un libanes llamado Assad y no saben lo que disfrute de ambos, su humor, sus rarezas, sus encuentros culturales, Assad que es un policía frustrado, pero bastante inteligente, comienza a ayudar a Carl y este aprovecha al máximo a Assad, para resolver su primer caso, la desaparición de una política hacia 5 años, de la cual habían deducido que se había ahogado en el mar, al no encontrar ni sospechosos, ni el cuerpo.Por otro lado, vemos a Merete, la política desaparecida, contarnos su historia desde su desaparición.No voy a contarles mas, solo decirles, que es un libro estupendo, de esos que nos tiene tomados por todos lados esperando saber quien es el culpable y buscando pistas junto con Carl por todos lados, imposible no meterte en la historia, imposible no empatizar con Carl y Assad, imposible dejar de leer.De esos libros que a pesar de que te cuentan la historia cruda que tienen este tipo de libros por su genero, también el autor nos presenta a los personajes de una manera extraordinaria, podemos simpatizar con ellos, incluso reírnos de ellos y lo que les sucede, pero al mismo tiempo angustiarnos por todo lo que el caso presenta.Muy recomendable, obviamente voy a seguir con los demás libros y bueno, en mi caso, no he visto ninguna de las peliculas, además de ser Danesas, la verdad es que nunca me ha gustado mucho verlas después de leer los libros, pero si alguien las ha visto ya me comentará que tal están.

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Carl Mørck de jefe del Departamento Q! El jefe de Homicidios se lo estaba imaginando. Una unidad así podía gestionarse fácilmente con un presupuesto de menos de un millón al año. Incluidos viajes, análisis de laboratorio y toda la pesca. ~ La mujer que arañaba las paredes de Jussi Adler-Olsen.Carl Mørk, investigador criminal, está en horas bajas. Su última investigación terminó con un compañero muerto y otro en el hospital. Sin embargo, lo ponen al frente de un nuevo departamento de la policía de Dinamarca dedicado a la resolución de crímenes sin resolver. El objetivo es aparcar allí a Carl e ir cobrando el suculento presupuesto del que se va a dotar dicho departamento pero las cosas no salen como estaban previstas.A Carl le adjudican un extraño compañero con ansias investigadoras y los dos acaban sumergidos en la investigación de la desaparición de la joven política Merete.Hace más de cinco años que no se sabe nada de la joven de la que se perdió la pista cuando viajaba con su hermano Uffe a bordo de un ferrie. Mientras, Merete permanece encerrada y presa a la espera de la fecha de su muerte. La cuestión es si los investigadores encontrarán a Merete y serán capaces de salvarla antes del día D.Primer libro de los casos del Departamento Q, una saga que seguiré leyendo porque tiene los ingredientes que valoro. Los personajes con su toque de humor y cinismo me han encantado y estoy deseando saber cómo sigue la relación entre ellos. Quizá la investigación me ha parecido un poco más enredada pero creo que es porque en este libro el foco estaba más puesto en la creación del departamento y perfil de los personajes que en otra cosa.

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Primer libro de la Serie del Departamento Q, que por ahora creo que hay hasta 9, merece mucho la pena, porque como ya sabéis adoro los thrillers y mas si son nórdicos, y este precisamente esta ambientado en Dinamarca. Nuestro protagonista, Carl, es un policía al que han adjudicado en un nuevo departamento, para investigar casos que quedaron sin resolver, Carl y su ayudante Assad, investigaran entonces una desaparición que ocurrió hace cinco años, un política bastante famosa y que dedujeron que se habia ahogado en el mar. Por tanto, la novela esta contada en dos tiempos, por un lado narrará la investigación de Carl, como va tirando de hilos que quedaron mal investigados y la historia estará contada en el presente. Y por otro lado tenemos la historia de la política, Merete, que se va contando desde el año 2002 hasta llegar al presente. Es una historia cruda y la trama es muy dura, sobretodo la parte que esta contada por Merete. Pero aun así es una historia que te mantiene enganchada desde el principio, queriendo saber que pasa o no, y la verdad que el final es muy bueno, queda bien cerrado y eso me gusta. Algo que me ha gustado, son los personajes, sobretodo los principales, llegas a empatizar muy bien con ellos, y aunque hay gran cantidad de ellos y con nombres ? daneses? al final te acabas haciendo a la historia. He de decir que es algo predecible y en ocasiones algo lento, aun así, pienso seguir con la serie porque me encantan los thrillers nórdicos

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En esta primera entrega de la saga Departamento Q vamos a conocer a Carl un policía que lo está pasando muy mal en este momento y sus jefes para quitárselo de encima crean un nuevo departamento para investigar casos de hace tiempo que quedaron sin resolver. Carl junto con su ayudante Assad, que no es policía, decide investigar la desaparición de una política muy famosa llamada Merete, que desapareció un día mientras viajaba en un ferry y no se volvió a saber nada de ella. El libro va dando saltos en el tiempo y va contando varias historias la de Carl por un lado con la investigación y la de Merete, que vamos viendo todo lo que la va ocurriendo pues está secuestrada desde hace años y decir que lo está pasando horrible es poco. He de reconocer que el comienzo del libro me ha parecido lento pero a medida que avanza la historia y la investigación te va enganchando más, también cuanto más conocía a Carl y a Assad más me gustaban, me han encantado ambos y el toque de humor que le ponen a ratos a la historia. En líneas generales me ha parecido un buen thriller, es entretenido, engancha, tiene personajes que gustan y un buen final, por lo que espero seguir leyendo más libros de esta saga pronto.

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Conocí la serie de libros de Los casos del Departamento Q a través de la película Misericordia, la adaptación cinematográfica de este primer volumen, donde conocemos al inspector Carl Mørck y a su ayudante, Assad. Me encantan esos personajes oscuros y llenos de claroscuros como Mørck, del que estás constantemente esperando lo mejor y lo peor como persona. Y eso tiñe toda la novela, esa sensación de que toda la sociedad está cubierta de moho (metafóricamente hablando, por supuesto) y ajada, como lo ve el propio protagonista, cosa a la que, por otra parte, nos tiene acostumbrados el thriller de origen danés (diría que de los países nórdicos, pero no quiero pecar de meter a todo el mundo en el mismo saco). Su lectura no es tan directa y fluida como la de los best-sellers americanos al estilo de la serie de Jack Reacher o similares, pero es que aquí cada inflexión cuenta, y detrás de los crímenes investigados por el Departamento Q siempre hay mucho trasfondo político, económico... (no por nada el Departamento se creó para investigar casos sospechosos de haber sido enterrados por intereses partidistas). Lectura de fondo para los amantes del género, y puerta a una serie ya icónica. MUY RECOMENDABLE