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Remitiéndose a la historia del descubrimiento de America realiza una exploración filosófica, a través de un lenguaje que pugna entre lo poético y lo sofisticado. No se deja conocer el protagonista, no hay necesidad, es cualquiera, en tránsito por la vida. Narrada, desde la memoria de un marinero, abarca la memoria de su mundo. del mundo. Una historia de supervivencia, donde la misma depende del azar. En todos los aspectos. Pero no de la simple casualidad, lo hace a partir del establecimiento de conductas que no requieren ser explicadas para ser realizadas, repetidas y convertirse en el centro vital de las acciones de los hombres. Decisiones que se toman sin tener conciencia de ellas. Un grumete,que por esas mismas razones decide embarcarse, ve su vida confrontada a choques que no clarifican su entendimiento, sin embargo amplían su capacidad de discernir. Lo llevan a explorar el comportamiento de quienes lo rodean, a tratar de explicarlo, a justificarlo. Retoma cada hecho como una inmutable necesidad de confundir y confundirse con el entorno espacio temporal. De aceptar las verdades universales como simples apreciaciones personales, suyas y de sus congéneres. Sujetas a leyes universales que si bien dominan el devenir de la vida no carecen de interrogantes. Su travesía en barco sólo es plácida por elección. Su cautiverio y mantenimiento como entenado obedece a causalidades que se confunden con casualidad, su regreso a la civilización trae más dudas y preguntas que confort y respuestas y si bien no parece resentir lo vivido, cada línea esta cargada de un resentimiento placentero, de una resignación que adormece y atormenta. . La grandiosidad de la naturaleza, la inmensidad del universo. La atemporalidad del tiempo son protagonistas esenciales. Los indios son parte del entorno, son presurosos como el tiempo, son cambiantes como las estaciones, y sus costumbres son producto de su entorno, entorno que los unifica y cohesiona . Metáforas existencial, solo somos porque creemos ser, el exterior es siempre parte del interior, y el interior nada vale sin la validación del exterior. Viaje histórico, Viaje filosófico. Exploración de lo desconocido. Por más que se crea conocer. nunca entendí su lenguaje, pero un sonido quería decir tantas cosas, lo existente y lo opuesto. Pues nada había que pudiera nombrar algo, sin abarcarlo todo

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El entenado de Juan José Saer es una novela publicada en el año 1983. Tiene como narrador a un hombre que participó de una de las primeras expediciones a América. Apelando a su memoria, inicia un viaje en retrospectiva que abarca unos diez año como cautivo de la tribu Colastiné, quienes eran aborígenes antropofágicos. Si bien este hecho es verídico, ya que él fue grumete del conquistador español Juan Díaz de Solís en el año 1516, no se trata de una novela histórica. El narrador, protagonista y testigo, no busca reconstruir la historia. Para nada. No hay en ningún momento una referencia clara a este hecho histórico. . Como lectores, nos encontramos ante un narrador que toma distancia de lo que está sucediendo con él para analizar y reflexionar todo el tiempo sobre la condición del ser. Vamos a encontrarnos con una historia que puede ser entendida desde distintas perspectivas: antropológica, filosófica, metafísica e incluso sociolingüística. El análisis de los verbos ser, estar y parecer tiene un lugar primordial en la novela, así como también en la construcción de la subjetividad a partir de las experiencias traídas a la memoria mediante el recuerdo. . Con esta novela, Saer volvió a desafiarme como lectora y a envolverme nuevamente en su narrativa. Por algo será que Ricardo Piglia, un crítico argentino, lo considera como uno de los grandes vanguardistas de la literatura argentina. Espero pronto estar leyendo algo más de él. Enlace: https://www.instagram.com/p/..

Comentarios de lectores del libro El entenado