Pedro pastorea sus ovejas en los barrancos más remotos de Sierra Nevada, poco tiempo después de la expulsión de los moriscos del Reino de Granada, acaecida tras la Guerra de las Alpujarras. Su vida cambiará bruscamente tras sufrir una caída y verse obligado a aceptar la hospitalidad de una extraña mujer, lo que lo conducirá a ser hecho prisionero por extraños y anacrónicos personajes que habitan en lo más profundo de la sierra.