Hace un cuarto de siglo, en 1989, la historia se aceleró. Fue un año lleno de acontecimientos: desde la derrota de la Unió Soviética en Afganistán por los Talibanes hasta la revuelta de la plaza Tiananmen en PekÃn, el fin del Apartheid en Sudáfrica o el de la dictadura pinochetista en Chile. Por encima de todo fue el año de la caÃda del Muro de BerlÃn, que supuso el fin del mundo congelado de la Guerra FrÃa. La inercia de aquel momento todavÃa nos mueve. Al igual que dos siglos antes, cuando la toma de la Bastilla supuso el fin del ancien régime, todo cambió. La principal consecuencia de aquel súbito deshielo fue el regreso de la GeografÃa. Europa volvió a ser ese espacio geopolÃtico que se controla desde el centro. Alemania ocupa ese lugar en lo geográfico y también en lo económico. Es el paÃs más poderoso de Europa y se le exige que asuma el liderazgo. Pero ¿están preparados los alemanes para ello? ¿Qué quiere Alemania? ¿Cuáles son sus intereses? ¿En qué afecta todo ello a sus socios europeos? J. M. Martà Font, que era el corresponsal del diario El PaÃs en Alemania cuando cayó el muro, la ha recorrido de nuevo para pulsar los muchos factores que la componen: el papel de la memoria, la impronta siempre presente de la reforma protestante, la conciencia ecológica, el terrible peso de la historia, la nueva sensació de lo que significa ser alemán, la relació con sus vecinos, la potencia de su economÃa productiva, el reto de la nueva polÃtica energética, las grandes diferencias internas de un paÃs sorprendentemente plural o el papel decisivo de la inmigració en la configuració de la sociedad. El resultado es un análisis lúcido y revelador de cómo Alemania moldea a Europa y a su vez es moldeada por ella.