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Mi ritmo de lectura en esta saga ha decaído un poco, he tardado más en terminar este libro pero no fue porque no me gustara, sino porque tenía otras lecturas intercaladas que debía leer antes por compromiso editorial. Tenía miedo con este título porque hay una parte del fandom de Canción de hielo y fuego que reniega un poco de Festín y Danza, se quejan de que son aburridos, de la falta de ritmo, de la separación de perosnajes? en fin, el mundo no es perfecto y aunque no es ideal que se tuviera que dividir el libro en dos, entiendo que a veces la historia es más grande que lo que el autor planeó y esta fue la opción menos mala por la que optaron, no había otra manera de hacerlo, creo que yo. Efectivamente, Festín de cuervos tiene otro tono y otro ritmo, no hay grandes batallas, no hay grandes muertes, es mucho más político, no en vano se centra bastante en Desembarco y alrededores, pero no por eso me ha disgustado. Aunque lo fue leyendo poco a poco siempre que volvía a él me atraía, no me resultaba pesado, no me cansé de la historia y los puntos de vista que trata (en el que aparece Cercei por primera vez, así como Arianne o Doran Martell) me han gustado mucho. Incluso Sam o Brienne, que a veces no tienen al público consigo, yo he disfrutado de sus historias. Tal vez mis favoritos hayan sido Cercei, por lo que nos muestra de ella, de su pasado, de su mente algo confusa y por como le salen los planes, también Arya me ha gustado, la igual que Sansa. No sé por este es un personaje tan odiado si se ve que es muy joven, como le dijo Meñique todavía es una pieza y espero que con el tiempo se convierta en una jugadora, así como en la serie (aunque mejor). Y hablando de la serie, el final de esta no me ha gustado, concretamente por las prisas y las incoherencias, más que por los hechos en sí, y creo que de aquí a que me atreva con Danza de dragones pasará un tiempo por esa sensación de resaca y decepción que aun arrastro conmigo. No obstante, la sensación cuando leo los libros es distinta, los veo como algo diferente a la serie pero aun así un descanso no me vendrá mal, no quiero contagiar mi experiencia lectora con el amargor que me dejaron las últimas temporadas. Siempre que la gente hablaba de Dorne decía maravillas y era uno de los aspectos acerca de los que más quería saber. Doran Martell me ha gustado mucho, es un poco frustrante como lo trata su hija pero al final vemos que es muy inteligente, muy paciente y que merece ser el príncipe de Dorne. Veremos qué les depara en el futuro y como suceden las cosas, pero me encantaría leer más sobre este personaje. Por otra parte, Brienne me ha gustado porque las tramas que suceden en los caminos me gustan mucho, la pobre no ha tenido mucha suerte, el final en este libro es inquietante pero me ha gustado lo que nos ha mostrado del reino. Sansa sigue siendo una niña que más que actuar observa, todavía es muy joven, pero gracias a ella sabemos más sobre Meñique y sus planes, espero que en el futuro nos muestre lo que ha aprendido de él. Conocemos más a los gemelos Lannister y vemos lo que sucede en sus mentes. Están los dos bastante perdidos y un poco asustados, quizá Cercei sea quien está más asustada y aunque procura autoconvencerse de que es lo bastante inteligente para el juego de tronos parece que nadie más piensa así. Jaime, por su parte, logra alguna victoria aunque en todo momento se siente algo asqueado de sí mismo, su relación con Cercei se ha deteriorado mucho y empieza a pensar en ir por otro camino. Creo que hasta que salga Vientos de invierno no sabremos mucho más del o que sucede con ellos, espero que los rumores que indican que Martín podría publicarlo para septiembre u octubre se cumplan. Mi visión general de Festín de cuervos es positiva, no es un libro con tanta acción como los anteriores y no tiene nada de mágico, se centra en lo político, pero no por ello es menos interesante. Se echan en falta algunos personajes y entiendo por qué hay quien recomienda leer a la vez Festín y Danza, pero en este caso he decido seguir el orden de publicación editorial. Creo que es disfrutable, tiene momentos de lo más interesantes, me han gustado todos los personajes y no lo he sentido pesado en ningún momento. Tengo ganas de saber qué pienso de Danza de dragones y de saber muchas cosas nuevas, puesto que vengo de la serie y a partir de estos libros es cuando se nota un cambio mayor. Canción de hielo y fuego continúa y continuará durante bastantes años más. No estoy resentida con Martin, creo que lo que está haciendo es muy difícil y estoy segura de que lo que nos espera merecerá la pena. Mientras, solo podemos esperar, releer y disfrutar de los otros libros como Fuego y sangre o El mundo de hielo y fuego. Si queréis entender mejor este universo os animo a escuchar el Podcast de Hielo y fuego, un podcast muy divertido en el que se analizan muchos aspectos de las novelas que un lector normal no advertiría, con enfoques muy documentados e interesantes.

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El panorama en Festín de Cuervos es el ver a nuestros personajes sumidos en situaciones que los han guiado las decisiones que han tomado a lo largo de la historia. Y esto es a mención de ver que toda la historia envolvió en situaciones sorprendentes (como fue la boda roja) y que el lector se genera expectativas ante las consecuencias de todo lo que hemos leído en Tormenta de Espadas (el que apunta a ser el mejor libro de toda la saga). Festín de Cuervos no decepciona, pero sí deja que desear un poco. El problema reside en que el autor decidió dividir entre éste y Danza de Dragones por áreas geográficas, por lo tanto, sólo nos encontraremos con personajes de Poniente o de Dorne: Cercei, Jaime, Asha, Brienne, Samwell, Victorion Greyjoy, entre otros. Dejando para el otro libro zonas como las ciudades libres y el muro (ya se imaginarán quienes aparecen el libro siguiente). Es por eso, que algunas personas recomiendan que se lean los dos libros a la par. Un capítulo del otro y otro capítulo del libro que le sigue, pero personalmente, lo leí entero porque prefería leerlo como fue publicado (además de que sentí que me confudiría más si lo hacía de la manera recomendada). Mencionado aquello, diría que el libro padece un poco de lentitud y esto es porque encontramos con personajes que no son del todo interesantes o porque ciertas escenas se sienten de relleno y también la falta de personajes de mayor peso (como Jon Snow o Daenerys) hacen que el lector se tarde en pasar de una página a otra, sin embargo, esto se compensa un pocoprincipalmente con los capítulos de Jaimie y Cercei donde George Martin crea un ambiente propio de personas que lidian con amor incestuoso roto y su situación desamparada tras lo acontecido en Tormenta de Espadas. En conclusión, es una entrega que puede disfrutarse a pesar de la lentitud en algunas de sus partes, pero logra compensarse con la integración de personajes fuertes. Me aventuro a señalar que puede ser el libro más débil de la saga (por la arriesgada división de personajes), sin embargo, eso no lo hace un mal libro. Su trama sigue siendo interesante y su final hará que sigamos interesados por leer Danza de Dragones.

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Hoy les traigo la reseña de la cuarta parte de la saga Canción de hielo y fuego. La leí en inglés durante mis vacaciones en enero de este año, pero recién ahora tengo tiempo de sentarme a escribir la reseña. Me gusta leer libros largos cuando estoy de vacaciones ya que si los leo durante el año laboral demoro mucho. Solo puedo leer los fines de semana. Me pasó con Tormenta de espadas, que lo leí en el invierno de 2016 y demoré cuatro meses (aunque leí otros libros de forma paralela), así que decidí que siempre voy a leer los libros gordos en mis vacaciones.Este libro comienza donde terminó Tormenta de espadas y es un libro de transición, tranquilo, con menos acción que los anteriores, pero que nos prepara para lo que se viene. Es como la calma que precede la tormenta. de todos modos, tiene buenos cliffhangers, algo que maneja de manera excelente Martin.Vamos a los números. Tenemos 5 escenarios (las Islas del Hierro, Dorne, Tierras de la Corona y Tierras de los Ríos, Braavos y el Mar Angosto, y el Valle de Arryn) con sus respectivas líneas argumentales que avanzan desde los puntos de vista de 13 personajes en 46 capítulos.En esta novela tienen un gran protagonismo las mujeres: Cersei, Brienne, Sansa (más que Arya), Asha Greyjoy, Arianne Martell, Margaery Tyrell y las Serpientes de Arena. Hay muchos capítulos de Cersei y Jaime, personaje que cada vez me interesa más. Con respecto a su hermana, Cersei se come el libro y el mundo; es una verdadera reina que maneja los hilos del poder. Me sorprendió mucho el último capítulo suyo. Martin dio un gran giro en la trama, algo totalmente inesperado, un cliffhanger gigante. También destaco el final del último capítulo narrado desde el punto de vista de Jaime. Me gustó conocer más sobre Asha y quedé intrigada con el futuro de Arianne y las Serpientes de Arena. Sansa creció mucho y cada vez es más adulta, responsable y madura. Me gusta cómo cuida a su primo.Extrañé mucho a Jon (aparece muy poco), Daenerys, Tyrion (mi personaje preferido) y ser Jorah. Creo que por eso le puse 4 estrellas a la novela en vez de 5. El propio autor nos cuenta que había escrito mucho y que, por eso, decidió dividir la historia en dos libros. También nos informa que en el próximo tomo nos encontraremos de vuelta con estos personajes tan queridos. Creo que contar toda la historia de la mitad de los personajes en vez de la mitad de la historia de todos los personajes fue algo que le convino a Martin como escritor, pero no a nosotros como lectores.A los que critican a George R. R. Martin porque demora mucho en escribir sus libros, les diría que tengan en cuenta que esta saga está llena de personajes, escenarios, acciones y una excelente construcción de un mundo de ficción con gran lujo de detalles. Todo eso lleva tiempo, no se puede hacer de un día para el otro. Para que todo encaje y nos deje con la boca abierta, el escritor tiene que trabajar duro y parejo durante años.En conclusión, Festín de cuervos es otro gran libro de Martin que, aunque no tenga tanta acción como los anteriores, cumple con su objetivo de entretenernos y mantenernos enganchados. Ya tengo mi ejemplar de Danza de dragones y lo voy a leer el próximo verano cuando esté de vacaciones. Mientras tanto, necesito digerir todo lo que pasó en este libro. Me pasa siempre eso con esta saga. No puedo leer un libro atrás del otro porque son demasiado complejos e intensos. Enlace: https://soldeechesortu.blogs..

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El invierno está cada vez más cerca y las piezas del juego de tronos no dejan de moverse a un ritmo frenético y sorprendente, apareciendo nuevos personajes o desvelándose secretos de los que ya conocíamos. En Festín de cuervos, Martin decide centrarse únicamente en los personajes de Desembarco del Rey ya que el libro que estaba escribiendo era tan abrumador que decidió dividirlo en dos (Festín de cuervos y Danza de dragones) y para poder cerrar ciertas tramas hacer un corte no cronológico sino geográfico. al principio sin ser consciente de esto, me sorprendí bastante al ver el índice y echar en falta a muuchos personajes, y no voy a mentir, me asusté un poco porque también había leído en otras reseñas que este era el peor de los cinco (deseando que pronto dejen de ser sólo cinco :(). Pese a mis prejuicios, la lectura, como siempre que leo algo de Canción de hielo y fuego, terminó absorbiéndome y si bien eché de menos a los personajes que ya había visto en el índice que no iban a estar presentes en la obra, me encantó profundizar en muchos otros y la novela se me hizo amena (y hasta corta). Si bien es un libro que tiene una trama más pausada y menos violenta que los anteriores, ya que las grandes batallas han culminado o están aún fraguándose, no es para nada aburrido ya que está plagado de giros sorprendentes y tiene una fuerte carga política, por lo que nos ayuda a entender ese nuevo orden que está surgiendo en Poniente tras la caída de los grandes señores y quiénes serán los que tomen el relevo.