Se reúnen aquà los cuentos dispersos de Esther Tusquets, expresión inmejorable de sus peculiares y exquisitas dotes de escritora: penetración psicológica y belleza estilÃstica. Abarcan los veinte años de su producción literaria y revelan fielmente la evolución de la autora: el primero «El Hombre que pintaba mariposas» es anterior a su primera novela, mientras que el último «Carta a la madre» es de fecha muy reciente.