«Soy Homer, el hermano ciego. No perdà la vista de golpe, fue como en el cine: un fundido lento». Asà empieza la historia de los hermanos Collyer que conmocionó al Nueva York de finales de los años cuarenta cuando los encontraron sepultados bajo toneladas de basura en su mansión de la Quinta Avenida. Doctorow aprovecha su propia fascinación por ellos, para llevarnos de la mano a través de los acontecimientos que rodearon la vida de sus personajes, que deciden ausentarse de la vida.