Suri nota en su marido Iñaque que algo no va bien. Ella era una mujer intuitiva, inteligente y conocÃa a Iñaque a la perfección. Por otra parte, habÃa pecado: cometÃa faltas e inconsciencias que, sin embargo, podÃan disculparse. Pero a Suri se le antojaba que aquella falta de Iñaque era superior a él, incluso superaba sus propios deberes.