El coronel Bantry vive apaciblemente su retiro, junto con su esposa Dorothy, en St. Mary Mead. Una mañana, su doncella rompe la tranquilidad cotidiana con una noticia insólita y escalofriante: 'Señora, hay un cadáver en la biblioteca'. La joven que aparece estrangulada tiene todo el aspecto de haber sido artista.