Desde que Evangeline era una niña ha tenido sueños recurrentes en los que ve a un hombre de cabello negro y ojos verdes que la llama. Él siempre ha aparecido vestido de vaquero en un rancho ganadero rodeado de montañas.Â
Cuando ella era pequeña, él se mostraba en sus sueños como un niño dos años mayor que ella, después, a medida que los años pasaban y Evangeline se convertÃa en adolescente, él también lo hacÃa... Y más tarde, ella lo vio convertirse en adulto... En sus sueños actuales, el hombre aparenta tener unos treinta y dos o treinta y tres años.Â
Cada noche, al cerrar los ojos y quedarse dormida, él acude a ella y le pide desesperadamente que lo busque, que lo encuentre. Él le dice que la ama. Le repite una y otra vez, “volvamos a casa” y Evangeline sabe, en su subconsciente que “casa”, es Escocia...Â
Pero ella nunca estuvo allÃ... No al menos, en ésta vida.