El famoso escritor de novelas policiacas, Arthur W. Upfield, ofrece en este libro una intriga sorprendente que tiene por personajes, no a los asesinos de los bajos fondos, sino a un grupo de renombrados escritores y críticos literarios, pues, como lo dice el autor, reyes, estadistas, comerciantes, barones, obreros y
escritores han cometido crímenes.
En un ambiente de refinada inteligencia, se gesta el crimen aparentemente más inexplicable.
Pero la intuición del célebre detective Napoleón Bonaparte Bony, desenreda la complicada madeja y desenmascara al criminal, con tal fuerza de testimonios que «UN AUTOR MUERDE EL POLVO».