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El silenciero de Antonio di Benedetto

de Antonio di Benedetto - Género: Drama
libro gratis El silenciero

Sinopsis

Las tres principales novelas de Antonio Di Benedetto, Zama, El silenciero y Los suicidas, en razón de la unidad estilística y temática que las rige, forman una especie de trilogía y, digámoslo desde ya para que quede claro de una vez por todas, constituyen uno de los momentos culminantes de la narrativa en lengua castellana de nuestro siglo. En la literatura argentina, Di Benedetto es uno de los pocos escritores que ha sabido elaborar un estilo propio, fundado en la exactitud y en la economía y que, a pesar de su laconismo y de su aparente pobreza, se modula en muchos matices, coloquiales o reflexivos, descriptivos o líricos, y es de una eficacia sorprendente. De ese arte singular, El silenciero es una de las cumbres.

Juan José Saer
A cuarenta años de su aparición, El silenciero se muestra como una de esas pocas obras cuya novedad es de destilación lenta. Proust y Kafka fueron casi invisibles en sus épocas y espacios, ocupados por tantos nombres ya olvidados. Es, a su medida -que es la del medio en nuestra lengua-, el caso de Di Benedetto.

La novela trata del silencio como objeto de locura. La obsesión del protagonista por eliminar el ruido que lo persigue hasta su dormitorio, lo arrastra, junto con su madre y su esposa, a la búsqueda sin fin de un lugar en la ciudad invulnerable al sonido. Todo es tenue al principio, mullido de cotidianidad; pero se va haciendo progresivamente sofocante en la voz del narrador. [...] En El silenciero Di Benedetto alcanza la cima depurada de su manera y de sus temas.

Edgardo Dobry, El País, Madrid


Lo que hace diferente a di Benedetto es esa escritura tan personal que tiene. Si en Zama su estilo está emparentado con el Siglo de Oro, aquí cambia totalmente de registro y se torna sencillo, pero preciso.La acción se desarrolla en torno a 1950 en una ciudad de América Latina. El progreso tiene como consecuencia la proliferación de autos, fabricas, talleres... y el consiguiente ruido originado, de consecuencias fatales para el protagonista narrador sin nombre específico. Tiene elementos coincidentes con la personalidad de Benedetto, que odiaba el ruido y era amante del silencio. El personaje principal es muy sensible a toda clase de ruidos no naturales; sí gusta de la escucha a prudente volumen de la música clásica en la radio o los sonidos habituales como el fregar platos y vasos, es amante también de los sonidos de la naturaleza, los arroyos y cantos de pájaros. Pero le molesta cuando abren un taller cercano, los martillazos, la prueba de motores de coches y motocicletas. Vive con su madre, que procura restar importancia a los ruidos para que no sufra su hijo. Tiene a su vez un amigo, Besarion; bastante particular, busca señales que den un sentido a su vida, de carácter religioso. El narrador y su amigo, mantienen semejanzas, ambos tienen conflictos existenciales, viven con sus madres al carecer ya de sus respectivos padres. Comenzará una relación con Nina, que también tiene que sufrir los cambios de humor del personaje por los ruidos circundantes. Se mudarán de casa varias veces e incluso al campo, pero allí también le esperan los ruidos de una herrería.Es interesante la relación que se establece entre el personaje y el otro amenazante, aquí el ruido. Diferenciando los otros, su relación con las personas que le rodean y los otros que son ajenos y provocan ruido o la policía que se cansa de su intransigencia. Su personalidad interviene en la personalidad de su núcleo principal, que tiene que adaptarse a su exceso de sensibilidad a cualquier interferencia.Es preciso notar la influencia de Schopenhauer, muy querido por el autor. El narrador lee unos pasajes en los que Schopenhauer muestra su apetencia por el los sonidos de la naturaleza y el silencio, en cambio le desesperan las voces altas de las personas y otros ruidos no naturales.El desdoblamiento que se producía en Diego de Zama, aquí es muy sugerente en el sentido de que el personaje está escribiendo un libro, de corte policial, experimenta deseos de quemar el taller, prende una llama para ver como arde e incluirla en la novela y se quema las cejas. En la novela tiene deseos de matar a los operarios del taller e ideas suicidas en torno a su personaje; pero establece la diferencia entre la vida real y la novelada, afirmando que él sería incapaz de quemar, asesinar o suicidarse. Muy sutil como Benedetto desdobla la personalidad de su narrador. Una posible interpretación admite que Besarion sea su otro Yo.Hay que destacar el sentido del humor que despliega di Benedetto a lo largo del libro, cuando se quema las cejas o sale a pasear con un palo, por miedo a las represalias de vecinos y trabajadores por su actitud intransigente con los ruidos, denunciando a los productores de ruido.El libro es una denuncia, a su vez, en torno a ciertas consecuencias del progreso. La irrupción de molestias en la convivencia normal. La instalación de toda clase de fábricas y talleres en torno a las viviendas con sus consiguientes perjuicios.