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La Casa Holandesa de Ann Patchett

de Ann Patchett - Género: Histórico
libro gratis La Casa Holandesa

Sinopsis

A finales de la Segunda Guerra Mundial, a Cyril Conroy lo visita la suerte: hace una única pero muy inteligente inversión que le permite poner en marcha lo que se convertirá en un gigantesco imperio inmobiliario. El negocio catapulta a su familia desde la pobreza a una ingente riqueza, y su primera decisión es comprar la Casa Holandesa, una rica mansión a las afueras de Filadelfia. La casa, que pretende ser un regalo para su esposa Elna, terminará marcando los designios de toda la familia.

Elna, incapaz de soportar la vida en una mansión como aquella, abandona a su familia para entregarse a los más necesitados. Maeve, la hermana mayor, se verá obligada a ejercer de madre para Danny, el pequeño. Circunstancias imprevisibles golpean a los hermanos, que se ven obligados a abandonar su casa de ensueño y rayan de nuevo la pobreza de la que habían escapado sus padres. La adversidad y una profunda nostalgia hacia el hogar que les ha sido arrebatado forjarán un vínculo indestructible entre ellos.

La Casa Holandesa es un cuento de hadas sembrado de claroscuros, un relato sobre un paraíso perdido que ahonda en cuestiones como la memoria, el amor y el perdón.---------------------La crítica ha dicho:

«La literatura de Ann Patchett es un milagro». The New York Times«La mejor novela de Patchett, que ya es decir». John Boyne, autor de El niño con el pijama de rayas«Una maestra de la narrativa contemporánea en la cumbre de su carrera». USA Today«La Casa Holandesa, con su indeleble agudeza, captura de forma brillante cómo el tiempo deshace todas las certezas». The Guardian«No querrás soltar esta novela tierna y cautivadora ni tras haber leído la última página». NPR«De Ann Patchett me leería hasta la lista de la compra». Jojo Moyes


Hola de nuevo. Hoy vengo con .La casa holandesa una novela que aunque me ha gustado, esperaba algo más. No es que me haya decepcionado, pero hay algo que no me acaba de llenar del todo. Quizás, puede ser que lo cogí con tantas ganas y tenía las expectativas muy altas y al leer tantos buenos comentarios... . . A pesar de tener giros inesperados no tiene un buen ritmo y le falta esa emoción o chispa que esperaba. Para mí han sobrado alguna que otra página. En las que se podría haber descrito un poco más a los personajes y quitar algún que otro detalle que no aportaban demasiado a la novela. Pero por supuesto, es mi humilde opinión. Y reitero, no me disgustó. Ya que la historia en sí, tiene una buena base. Recuerdos de infancia y juventud. El dolor, el amor, la traición, la pérdida, o la necesidad de perdonar para seguir avanzando. Son algunos de los temas que encontramos entre las páginas. Un drama familiar de varias décadas de historias de familia. Está Estructurado en tres partes, Divididos en capítulos. Donde Pasado, presente y futuro se unen. Brevemente os cuento: . .📖 La primera parte es la que más me gustó. Conoceremos a los dos hermano y las cosas que les suceden. . .📖 La segunda parte, algo más pesada y lenta. Nos narra los años de juventud. . .📖 La tercera parte, más acelerada. siendo ya adultos. Veremos como han creado sus vidas y evolucionado. . . .Qué os parece? Lo leísteis ? Contarme. .Ainssss, que daño hacen las expectativas altas, para todo en general 😝. .Os ha pasado alguna vez con algún libro? .
Esta novela está contada a la manera de los cuentos de hadas y que a su vez gira en torno a una mansión, fastuosa, colorida y casi encantada, una casa que es habitada por los Conroy, la familia que la ocupa cuando empieza la novela, aunque la novela parece que empieza de cero una y otra vez. La Casa Holandesa es una mansión construida en 1922 por una antigua y rica familia holandesa que cuando cae en desgracia y se arruina, es comprada con todo lo que hay dentro por Cyril Conroy como sorpresa para su esposa. Los Conroy habían sido pobres hasta que Cyril empezó a hacer dinero con la compraventa de edificios, así que la casa es una especie de simbolo de estos nuevos tiempos de riqueza para él. Sin embargo, su mujer, Elna, con una mentalidad completamente diferente, no es capaz de acostumbrarse a esta nueva riqueza, a esta casa que la supera estéticamente y no puede entender que con tanta pobreza haya gente capaz de vivir en un lugar tan ostentoso, así que muy pronto abandona a su marido y sus dos hijos pequeños, Maeve y Danny dejándoles en la casa holandesa.Cuando se presentaron en la Casa Holandesa aquel primer dia, se creían gente pobre. Ella lo obligó a contarle como había conseguido el dinero. Lo obligó, de verdad. Estaba convencida de que había hecho algo ilegal. En esa época nadie tenía esa cantidad de dinero.Este impactante abandono de Elna a su familia, es lo que marca el resto de la novela. Los niños crecen en un principio en un ambiente cálido pero la ausencia de su madre les marcará ya definitivamente porque una especie de misterio o interrogación define sus vidas...¿porqué si eran una familia feliz, su madre los abandona??? La figura de Elna, ausente durante casi toda la novela, es también al mismo tiempo un personaje siempre presente, nada invisible, porque continuamente se la está nombrando. La novela está contada desde el punto de vista de Danny, el hijo menor, testigo de todo lo que ocurre en la casa, sin embargo el personaje que en mi opinión marca toda la novela, el personaje guia es Maeve, la hermana mayor, que inmediatamente después de la marcha de la madre, se convierte en la madre de su hermano cuando es casi una niña todavia. Maeve es luminosa, responsable, como un faro guía que marcará para siempre la vida de Danny.Se lo debí decir a tu padre como cien veces; que Maeve se corte el pelo. Pero no me hacía caso. le daba igual. Yo siempre he querido que lo supieras, por tu propio bien. Llevas un pelo espantoso. Él no me lo permitió nunca. Siempre decía que era tu pelo, y punto.Pasado, presente y futuro se yuxtaponen una y otra vez bajo la visión de Danny de los acontecimientos de su vida, que como he dicho antes, es contada como un cuento: los niños huérfanos de madre, la madrastra mala malísima, los niños desterrados..., un sinfín de acontecimientos siempre contados con esa elegancia nada dramática ni sentimentaloide de Ann Patchett. Es una novela espectacular en ese sentido porque el lector se ve inmerso en una historia perfectamente organizada, e incluso los momentos más devastadores son los más luminosos, dónde la presencia de Maeve es un pilar majestuoso. Admito que es un personaje femenino que me ha impactado y maravillado.La Casa Holandesa es un edificio que ha significado diferentes etapas en las vidas de quienes la han habitado pero a los niños Conroy los ha marcado obsesivamente y hay maravillosos momentos en torno a la casa evocados por los hermanos una vez que no viven en ella, porque no pueden olvidarla en el sentido de que los momentos más tristes y más felices de su infancia se encuentran enquistados en la memoria de Danny y Maeve a través de esa casa.Si alguien me hubiera preguntado antes de aquella cita cuáles eran mis sentimientos al respecto de mi madre, le habría jurado que ninguno en especial. Me costaba entender la enormidad de mi ira.Me encanta Ann Patchett; es una escritora cuya escritura fluye casi sin esfuerzo para el lector, tan sútil y etérea en lo que cuenta, hace fácil lo más complejo.Y qué bien habla de los lazos emocionales, de los traumas de infancia y de como superar esas marcas del pasado. Me ha recordado mucho a El jilguero de Donna Tartt, porque toca todos estos temas y porque son dos novelas que me han emocionado muchísimo.Yo, sin embargo, no podía dejar de pensar en el retrato al óleo de Maeve, colgado en el salón, sin que ninguno de los dos viviéramos en aquella casa. Maeve aparecía en el cuadro con diez años de edad y abrigo rojo, una mirada directa e inteligente y la negra melena suelta. Enlace: https://kansasbooks.blogspot..
Los seres humanos somos capaces de obsesionarnos con gran diversidad de asuntos y cosas: la época del colegio o el instituto, el chico o la chica que alguien dejó escapar, el negocio que fue mal... O una casa. La casa en la que alguien creció y que, en algún momento, le fue arrebatada. Esta, la de su casa de la infancia de la que fueron expulsados bruscamente, es la obsesión de Maeve y Danny, los chicos de la interesante novela La Casa Holandesa, de Ann Patchett. Si quieres saber más sobre estos hermanos antes de decidirte a leer su historia de una vida, no tienes más que seguir leyendo esta reseña. Cuando Danny tenía tres años y su hermana Maeve once, su madre se fue a La India para ayudar a los más necesitados. Nunca volvería a por sus hijos. La Casa Holandesa, la mansión que Cyril, su marido, le comprara a las afueras de Filadelfia con el dinero amasado en sus negocios inmobiliarios, se había convertido para ella en una auténtica pesadilla. Cinco años más tarde, aparecerá en la vida de la familia Andrea, una mujer que parece más enamorada de la casa que de Cyril. Si bien los niños nunca llegan a congeniar con la novia de su padre, la relación se agrava cuando el progenitor decide casarse con Andrea y esta lleva a vivir a sus dos hijas pequeñas a la mansión. La muerte de Cyril a causa de un infarto precipita la salida de Danny y Maeve de la casa. Durante toda su vida, Maeve soñará con volver a la mansión mientras Danny solo quiere dedicarse al negocio inmobiliario, como su difunto padre. ¿Podrán los chicos perdonar en algún momento a las personas que les hicieron daño en el pasado y volver, tal vez, a la Casa Holandesa? Danny, el narrador y uno de los protagonistas de esta historia que cuenta la vida de una familia a lo largo de varias décadas, era un niño de apenas tres años de edad cuando su madre, Elna, decidió que la Casa Holandesa la asfixiaba y debía alejarse de ella para ocuparse de los más necesitados en La India. Maeve, sin embargo, ya tenía once años, por lo que no solo recordaría a su madre a la perfección, sino que el disgusto la haría contraer diabetes. Una vez recuperada de la crisis inicial, Maeve se encargaría de hacer de madre de Danny, si bien el chico también tendría el afecto de Sandy, el ama de llaves, y Jocelyn, la cocinera. Cyril, será un padre distante que, sin embargo, llevará a Danny todos los sábados a cobrar los alquileres de los inquilinos y hacer pequeños arreglos en los pisos alquilados. Cyril le regaló la Casa Holandesa, llamada así porque sus primeros dueños eran holandeses, a Elna, su primera esposa. Será Andrea, la segunda, sin embargo, la que se enamore de la mansión, hasta el punto de llegar a echar a Danny y Maeve de la misma cuando Cyril muere. Danny, como veremos en la narración, conseguirá sobreponerse al trauma mientras que Maeve no dejará de pensar en la casa hasta el día de su muerte. Los años pasan y vemos cómo los hermanos salen adelante. Danny llegará a casarse y tener hijos. Maeve, soltera, será feliz en su trabajo. de vez en cuando, ambos volverán a apostar el coche de Maeve ante la casa, a la espera de que algo suceda. Si bien los personajes principales, Danny y Maeve, están muy bien dibujados en las páginas de esta novela, tampoco podemos desmerecer a los secundarios, todos ellos girando alrededor de ellos: Cyril, el padre que quiere a sus hijos a su manera particular; la fría Andrea y sus inocentes hijas, Norma y Bright; Fiona, más conocida como Peluche, la niñera que fue misteriosamente despedida; Sandy y Jocelyn, las hermanas y mujeres del servicio que tanto querían a los niños; Elna, esa madre que se fue para ayudar a los necesitados y de la que todo el mundo habla tan bien, a pesar de haber dejado atrás a sus hijos?La Casa Holandesa, en definitiva, es una gran novela que nos habla sobre la alternancia de los ciclos de pobreza y riqueza en una familia, la fuerza de voluntad para salir delante de sus miembros más jóvenes, lo mucho que les dolía su pasado y la necesidad de perdonar a todos los que les hicieron daño. Esta historia, además, nos invita, gracias a las distintas versiones que los personajes ofrecen de los hechos del pasado, a reflexionar sobre lo que es verdad y lo que queremos que lo sea, y sobre todo aquello que, visto desde una perspectiva distinta, adquiere un significado diferente. Dicho esto, la pregunta es: ¿quedarás tú también embrujado por la Casa Holandesa una vez que te decidas por esta lectura? Enlace: https://laorilladelasletras...
Me pasó a mi con la portada del libro lo que al padre de los protagonistas con la casa que da título a la novela. Me encantó. Y, luego dentro, la lectura no ha sido tan buena como esperaba que fuera, como tampoco lo fue la vida en La Casa Holandesa para quienes en ella vivieron. Comprar un libro por la portada me pasa a veces y éste, aunque no lo elegí yo (es de los mensuales de Bookish), me enamoró nada más verlo. Y tocarlo, porque las letras del nombre de la autora y el título de la obra están en relieve. Y olerlo, porque huele como los libros deben leer al abanicar sus páginas. Por cierto papel de fibra certificado. Y además, con ese título, que parece pedir a gritos una imagen de la casa que por extraña no dejamos de imaginar durante toda nuestra lectura, el hecho de que tuviera esta portada me mantuvo intrigada casi hasta el final. La imagen del cuadro de la chica es una obra de Noah Saterstrom (que estaba sin mi hasta este libro) y no os puedo decir más. Una cosa, no leáis la contraportada, que destripa parte de las claves de la novela. Es preferible dejarse sorprender. Cuando he dicho arriba que la obra no ha sido tan buena como esperaba no quería decir que no me haya gustado, pero sí que ha habido muchas páginas que me han aburrido. Y me ha decepcionado que los personajes no parezcan evolucionar, pese a que los giros de la historia sí lo vaya haciendo. O por lo menos Danny, que me sigue pareciendo tan infantil como al principio, incapaz de profundizar en la complicada personalidad de su familia y demasiado centrado en lo que él desea como apreciar lo que quieren las personas que le rodean. No es mal tipo pero a veces dan ganas de sacudirlo. Evidentemente, el personaje central de la historia, aparte de la madre ausente y la mala madrastra, es Maeve, la hermana y casi madre de Danny, aunque sea éste quien la narre. Cuando la madre de ambos desaparece dejando un halo de misterio, orfandad y abandono en los hermanos, Maeve, mayor que Danny, cuida de él, le protege de Andrea, la madrastra (el prototipo de madrastra, con dos hijas de otro matrimonio, como la de la Cenicienta) y le hace estudiar medicina, aunque sea una carrera que él no desea, ya que todo su afán se centra en comprar edificios para rehabilitarlos y alquilar apartamentos, que es lo que hacía su padre, y aunque la idea de su hermana sea fundirse el fondo para estudios que es lo único que heredan de su padre, que le dejó todo a la madrastra. La casa se llama holandesa porque Cyril, el padre de Maeve y Danny, la compró al banco a precio de ganga cuando la familia holandesa que la había diseñado, decorado y habitado durante años, los VanHoebeek (pronunciado vanjúbeik), se arruinaron y murieron sin herederos. Fue un regalo para su esposa, a la que no parece que le hiciera mucha gracia porque, según parece, se marchó a la India abandonando a su familia. Según avanzamos en la lectura nos imaginamos la casa de una manera, porque resulta muy original, tanto en su concepción espacial, su arquitectura, su transparencia y su decoración. Sí, su decoración, porque Cyril compró la casa con todo lo que contenía: muebles, cuadros, libros... y no se cambia nada ni se le añade prácticamente nada. Incluso en el trato se incluye a Peluche, la hija del antiguo chófer y la antigua cocinera de los anteriores dueños que pasa a convertirse en la niñera de los hermanos, ya que su madrastra no les tiene mucho aprecio. La historia de la novela es un círculo que partiendo del día que Andrea y sus hijas llegan a La Casa Holandesa, poniendo patas arriba el mundo de los dos hermanos, hasta que, muchos años después, con sus vidas más o menos organizadas, que han pasado como si mentalmente no hubieran evolucionado en absoluto desde su infancia, aparcando el coche cada poco tiempo frente a la casa sin atreverse a más, ocurre algo que revoluciona su existencia y, sobre todo, reexplica totalmente la historia que los hermanos tienen como recuerdo. Se reescribe casi todo al final y tiene un fin, un poquito moña a mi entender, que cambia nuestra perspectiva totalmente, como les pasa a los hermanos. Ya digo. No me ha disgustado pero se me han hecho lentos muchos pasajes y Danny me parece un simple de cuidado que no se entera de la misa la media y creo que muchos de los personajes podrían dar más juego y no aparecer tan planos y tan iguales en el tiempo. Pero no esta mal. Enlace: https://marinieves.blogspot...
Este es de ese tipo de libros que uno desea disfrutar con todas sus fuerzas, adentrarse entre sus páginas y degustar la historia que nos quiere contar de principio a fin. Pero a veces desear no es suficiente, y aunque lo intentes, sencillamente hay algunas historias que no están escritas para todo el mundo. Debo decir que estaba disfrutando mucho de este libro, pero llegado un punto dejó de resultarme interesante y se transformó, para mí, en otra historia más.La Casa Holandesa narra la vida de Maeve y Danny, una vida marcada por el abandono de su madre a muy temprana edad, el dolor y la culpa. El libro está dividido en tres partes, y yo sin duda me quedo con la primera, pues me ha parecido muy especial y me ha generado tanta diversidad de sentimientos que parecía que de verdad conocía a los personajes. He sentido muchísima rabia e impotencia, y es que creo que la autora sabe cómo hacer partícipe al lector de esta historia. Además, gracias a las descripciones, es muy fácil hacerse una idea de todo lo que está sucediendo, y te permite adentrarte en la historia y sentirla plenamente, como si fueras uno más de la familia. Esta primera parte me ha parecido preciosa, sin embargo, tengo que decir que a partir de la segunda parte mi interés fue decayendo, ya que sentía que la trama estaba perdiendo vida y ese toque que la hacía especial. Reconozco que me ha resultado bastante difícil avanzar con la lectura llegado este punto, porque la historia estaba adquiriendo una cierta lentitud. Sí que me gustaría destacar el maravilloso estilo narrativo, me ha parecido que el libro está escrito con mucha elegancia y delicadeza, y ha sido esto lo que ha conseguido que continuara leyendo hasta el final.Conocemos la historia a través de la mirada del más pequeño de la familia, Danny. Para mí, los personajes son lo mejor de todo este libro, pues son fantásticos y tienen un desarrollo impresionante. Los acompañamos a lo largo de toda su vida, desde su infancia hasta la vejez, y los vemos transformarse en unos adultos que no son capaces de superar el pasado, marcado por la ausencia de su madre y otras muchas dificultades por las que tuvieron que pasar.Es una verdadera pena que sólo haya podido disfrutar realmente una pequeña parte del libro. A modo de conclusión decir que para mí lo más interesante de esta historia se narra en la primera parte, después de esto se transforma en una historia más común y pierde ese toque que la hacía peculiar. Aún así, si os gustan las historias de drama familiar, creo que podréis disfrutar mucho de este libro. Enlace: https://www.planetasingular...